“El Banquete” de Platón es mucho más que un tratado filosófico
sobre el amor. Es una construcción literaria compleja, donde el diálogo, la
memoria y el deseo se entrelazan para explorar la naturaleza de Eros desde
distintas voces y perspectivas. La obra se abre con un relato enmarcado que
recuerda al lector que toda búsqueda de la verdad es mediada por el lenguaje y
el tiempo. A través de los discursos de Fedro, Pausanias, Erixímaco,
Aristófanes, Agatón, Sócrates (mediante Diotima) y Alcibíades, Platón compone
un ascenso espiritual que va desde la exaltación heroica hasta la contemplación
de la Belleza en sí, mientras el eros se muestra como carencia, impulso
creativo y anhelo de eternidad. Cada discurso aporta un estilo propio: desde el
mito hasta la argumentación racional, desde la confesión dramática hasta la
mayéutica filosófica, el amor aparece como un prisma inagotable. Este diálogo
no ofrece definiciones cerradas sobre el amor, sino que lo representa en su
complejidad y en su potencia transformadora. En “El Banquete”, Platón convierte
al amor en el motor mismo de la filosofía: un deseo de saber, un impulso hacia
lo eterno y una búsqueda constante de aquello que todavía no se posee.
martes, 9 de diciembre de 2025
Platón y el amor: lo que El Banquete revela
Fernando Chelle
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario